Sobreviviente de intento de feminicidio hace la chamba a la Fiscalía; busca a su agresor para detenerlo ▶
Lo que faltaba…
Una víctima de intento de feminicidio le está haciendo la tarea a la Fiscalía General del Estado de Oaxaca, pero especialmente a los elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), ya que busca a su agresor para entregarlo al juez y que sea procesado.
Ella es Rosalba, una mujer de 35 años, quien sobrevivió tras haber recibido 15 puñaladas de su expareja Braulio A. B., prófugo de la justicia.
Acompañada por el colectivo Violencia por ser Mujeres, decidió emprender la búsqueda de su agresor, por la lentitud con la que trabajan las autoridades ministeriales del estado, o por el poco interés que tienen por resolver este tipo de delitos.
A la par del proceso de recuperación por las heridas provocadas y trabajar para solventar los gastos de la manutención del hogar y curaciones, también busca al presunto feminicida, quien está localizable, pero por la lentitud y falta de disposición de los agentes investigadores no ha sido detenido.
Expuso que en su momento le informó la ubicación (de Braulio) a la Fiscalía de Oaxaca, pero sus agentes argumentaron falta de gasolina y de vehículo, para ejecutar la orden de aprehensión.
Ante la proximidad de cumplirse nueve meses del intento de feminicidio, Rosalba, acompañada por Ana Laura Herrera López y activistas feministas, decidieron encadenarse varias horas a las rejas del Centro de Justicia para las Mujeres y la Subprocuraduría de Delitos contra la Mujer por Razón de Género.
Por medio de cartulinas reclamaron justicia y denunciaron un rezago en la integración de más de una decena de carpetas de investigación “por delitos cometidos por razón de género”, aunque en pocos casos lograron vivir para contarlo, como ocurrió con Rosalba.
El ataque a Rosalba ocurrió el 21 de agosto de 2022, en el municipio de San Jacinto Amilpas, tras siete meses de vivir separada de Braulio, empleado de un supermercado.
La víctima aseguró que el agresor vive en Oaxaca, pero a pesar de las pruebas que ha presentado ante la Fiscalía de las probables direcciones donde se encuentra su expareja y padre de sus hijos, los agentes “no han logrado detenerlo o no lo quieren detener”.
Actualmente, Rosalba cuenta con medidas de protección para salvaguardar la vida de sus hijos y de ella, pero está latente el miedo de que Braulio regrese a cumplir sus amenazas.