
Trump advierte “graves problemas” en México y respalda ataques del Pentágono tras represión a marcha juvenil Z
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este lunes que siguió de cerca los acontecimientos registrados el fin de semana en el Zócalo capitalino y concluyó que México enfrenta “graves problemas”. Sus declaraciones reavivaron el debate sobre la crisis interna mexicana y el impacto internacional de la violencia vinculada al narcotráfico.
Trump expresó su respaldo a que el Pentágono realice ataques focalizados contra los cárteles del narcotráfico en territorio mexicano, al considerar insuficientes los resultados del gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum. Señaló que su administración “no está feliz” con las acciones emprendidas hasta ahora y exigió una respuesta más contundente.
Esta declaración surge tras la masiva protesta del 15 de noviembre, cuando miles de jóvenes de la Generación Z marcharon en Ciudad de México contra la violencia de los carteles del narcotráfico, la corrupción y la impunidad. La movilización, detonada por el asesinato del alcalde Carlos Manzo, de Uruapan, Michoacán, a mano del crimen, organizado, derivó en enfrentamientos con la policía que dejaron más de 120 heridos y 19 detenidos.
La marcha expuso tensiones profundas sobre la debilidad institucional frente a la delincuencia organizada. Mientras los jóvenes señalaron la inacción gubernamental, las autoridades locales atribuyeron los choques a grupos infiltrados, minimizando la demanda central por mayor acción contra la violencia estructural. El episodio evidenció un creciente hartazgo social y una fractura generacional.
En conferencia desde el Despacho Oval, Trump vinculó las protestas con una supuesta permisividad mexicana hacia los cárteles, reiterando que Estados Unidos sufre consecuencias directas por el tráfico de drogas. Al ser consultado sobre posibles ataques en México, respondió: “Por mí, está bien. Lo que sea necesario”, elevando el tono de la presión bilateral.
Las declaraciones representan una escalada retórica con implicaciones diplomáticas sensibles. Aunque Trump argumenta la necesidad de frenar sustancias como el fentanilo, su postura amenaza la soberanía mexicana y simplifica un problema multinacional. El gobierno de Sheinbaum calificó sus comentarios como interferencia, defendiendo su estrategia ante críticas por resultados insuficientes.

