Separan del cargo a funcionario del IEEPO por usar influencias para evadir responsabilidad tras atropellar a policías
El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, ordenó al director del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), Emilio Montero Pérez, separar del cargo al oficial mayor de la dependencia, Abel Jesús Leyva Gandarillas. La decisión se tomó tras el involucramiento del funcionario en un accidente de tránsito del cual intentó evadir su responsabilidad al huir de la escena.
El incidente ocurrió la tarde del mar5es en San Antonio de la Cal, municipio conurbado a Oaxaca capital, donde Leyva Gandarillas, aparentemente en estado inconveniente, arrolló a dos policías viales. Los oficiales, quienes circulaban en una motocicleta, intentaron detener al funcionario, pero este los embistió con su vehículo.
El caso tomó mayor relevancia cuando se filtró un video en redes sociales que muestra al funcionario presuntamente intentando “charolear” a las autoridades para evitar ser sancionado. En las imágenes, que rápidamente se viralizaron, se observa a uno de los policías herido en el asfalto mientras Leyva Gandarillas intenta utilizar su influencia política para esquivar las consecuencias legales.
El video difundido en diversas plataformas digitales, incluyendo cuentas en X (antes Twitter), también registra al funcionario solicitando la intervención de “Toribio”, nombre que coincide con el del director de la Policía Vial del Gobierno de Oaxaca, Toribio López Sánchez. Esto ha generado indignación entre la ciudadanía, quienes exigen transparencia y justicia ante lo ocurrido.
Según trascendió, la intervención de Toribio López Sánchez habría sido determinante para que el funcionario fuera liberado por los policías de San Antonio de la Cal que lo habían detenido. Este hecho ha generado críticas sobre un posible encubrimiento y el uso indebido de influencias dentro de la administración estatal.
Por la mañana, antes de ser separado de su cargo, Abel Jesús Leyva Gandarillas ofreció una versión distinta en entrevista con una radiodifusora local. El funcionario afirmó que fueron los policías quienes impactaron su vehículo mientras él regresaba de una reunión de trabajo en la ribera del río Salado, en jurisdicción de San Antonio de la Cal. Según su declaración, tras el percance, descendió de su camioneta para brindar auxilio y esclarecer responsabilidades.
Leyva Gandarillas lamentó la difusión de lo que calificó como “versiones inexactas” y acusó al presidente municipal de San Antonio de la Cal de intentar politizar el incidente para sacar beneficios personales. Según el funcionario, el caso fue resuelto mediante un convenio firmado entre las partes involucradas en el Palacio Municipal.
El caso evidencia una vez más el poder de las redes sociales para visibilizar presuntos actos de corrupción y exigir justicia. No obstante, persiste la exigencia ciudadana de que las autoridades tomen medidas contundentes para evitar la impunidad y establecer mecanismos que prevengan abusos de poder en el futuro.
