
Gobierno de Oaxaca no resuelve la escasez de agua «si no hay negocio» de por medio: ONGs
Hasta principios del mes de junio, la capital oaxaqueña enfrentó una las peores crisis hídricas que tenga registro en su historia moderna, según datos del Instituto de la Naturaleza y la Sociedad de Oaxaca (INSO).
La sequía dejó al mínimo a la mayoría de los pozos profundos del Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable (Soapa), dependientes del gobierno estatal, quien en esta reciente crisis no tuvo las respuestas adecuadas para enfrentar la sequía de los manantiales de San Agustín Etla, San Andrés Huayápam y San Felipe del Agua, que abastecen al área metropolitana.
El pasado mes de abril, Nazario García Ramírez, integrante del Colectivo de Organizaciones Ambientalistas de Oaxaca (COAO), denunció que 8 de cada diez habitantes de Oaxaca de Juárez y municipios conurbados no tuvieron acceso al agua por lapsos que iban de 30 a 60 días, y tuvieron que pagar pipas con precios que iban de los mil 700 y en algunos casos hasta 3 mil pesos, sin que intervinieran las autoridades estatales para evitar estos abusos.
Por el contrario, existieron denuncias de huachicoleo de agua por parte de los mismos funcionarios estatales que no fueron investigadas por la Secretaría de la Honestidad del Gobierno de Oaxaca, lo que antes fue la Secretaría de la Contraloria.
De acuerdo con el COAO, existe la intención del gobierno de Salomón Jara Cruz de traer el agua que requiere la zona metropolitana de Oaxaca desde la Presa Paso Ancho, localizada en los límites de San Vicente Coatlán y Villa Sola de Vega, en la Sierra Sur, a cientos de kilómetros de esta capital, obra que fue y sigue siendo rechazada por las comunidades, cuando el gobierno de Gabino Cué intentó realizar el proyecto con un presupuesto multimillonario.
Nazario García insiste en que este es un proyecto de alto costo. Es más barato rehabilitar las Cuencas del Valle Central, “pero esto no deja dinero para los servidores públicos estatales y federales”, y por eso prefieren hacer nuevos proyectos para traer el agua de otros lados.
A la fecha, y pese a la grave crisis hídrica que padecieron los habitantes de la zona metropolitana de Oaxaca, el gobierno estatal no ha realizado ningún proyecto para captar el agua de lluvia y recargue los mantos acuíferos del Valle de Oaxaca, decantándose por el proyecto Paso Ancho, a medio construir, a pesar del rechazo al proyecto por parte de las comunidades de la Sierra Sur.
Por su parte, Mauricio del Villar, del Observatorio Ciudadano del Agua> dijo que como ente ciudadano están interesados en saber quién controla el agua y bajo qué intereses económicos o políticos se distribuye, sobre todo porque ante la crisis de los últimos seis meses en la capital de Oaxaca>, detectaron que el gobierno oaxaqueño “todo lo ve como negocio”.
“Nosotros involucramos a la academia, la sociedad civil y se le invita al sector privado, pero los más importantes son los ciudadanos de a pie, el poder del foro y el observatorio, su gobernanza, recae en la Asamblea que está integrada por autoridades comunales y se va rotando la Asamblea cada tres o cuatro meses y en ellas, los municipios se fortalecen y retroalimentan los procesos y fijan su agenda a los demás”, explico el también integrante del INSO.
Precisó que existe preocupación de que la sequía que ha azotado a la entidad, se pierda con la temporada de lluvias –que sin duda será benéfica para recargar los mantos acuíferos–, pero también aleja el tema de la agenda pública, y eso le sirve a las autoridades para desviar la atención de un problema que año con año se agrava por el cambio climático y la falta de un Plan Hídrico Estatal, que incluya a las Asambleas Comunales de pueblos que ancestralmente han cuidado el agua.
FISCALIZACIÓN CIUDADANA
A un año de que 25 municipios ubicados en el margen de la Cuenca del Río Verde Atoyac, decidieran en Asamblea la instalación del Observatorio Ciudadano Comunitario del Agua y Medio Ambiente de los Valles Centrales de Oaxaca, se aceleraron los procesos para vincular las problemáticas de naturaleza a la gente, frente a la alarmante crisis hídrica que enfrenta la entidad del sur de México, sostiene Mauricio del Villar, secretario técnico de la iniciativa ciudadana.
Dijo que esta iniciativa es parte del Foro Oaxaqueño del Agua (FOA), que nació en 2003 y se ha convertido en los últimos 20 años, en un instrumento censor de las políticas públicas de la mayoría de los municipios de la zona metropolitana de la capital oaxaqueña, los cuales incumplen sanciones de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), y con ese pretexto la dependencia se niega a dar funcionamiento a plantas tratadoras de aguas residuales y se vuelve una cadena interminable de corrupción que aumenta la contaminación.
Precisó Mauricio del Villar que aunque el 9 de mayo de este año se instaló formalmente el Observatorio, fue en junio de 2023 –cuando fungió como anfitrión el municipio de Oaxaca de Juárez–, que la asamblea decidió la creación de la entidad social ante la falta de información y transparencia sobre el presupuesto estatal destinado al cuidado del medio ambiente, vigilancia y monitoreo de los ríos Atoyac y Salado, en los que habitan casi tres millones de personas, más del 70% del total de la población de toda la entidad.
Afirmó el representante de la sociedad civil que se han enfrentado desde 2003, cuando se creó el FOA, a la percepción de que el proyecto hídrico era algo orquestado desde el gobierno, porque en él participan todas las entidades que tienen que ver con el agua, y eso incluye los niveles federal, estatal y municipal, sin embargo, en realidad son un ente incómodo ante la autoridades.
“A los gobiernos estatal o municipal les toca reconocer este ente, no se trata de pedirles permiso para que permitan ser observados, se trata de transparentar los recursos y las acciones frente a una crisis que en Oaxaca se ha convertido en asunto de salud pública, y no de funcionarios que tienen tendencia a ir a tomarse la foto, hablar quince minutos e irse, el Observatorio y sus asambleas necesitan soluciones que no han dado ante esta emergencia”, recalcó.