Denuncian enriquecimiento ilícito del gobernador Salomón Jara: remodela y adquiere ocho propiedades en menos de tres años

Denuncian enriquecimiento ilícito del gobernador Salomón Jara: remodela y adquiere ocho propiedades en menos de tres años

En menos de tres años de gobierno y con un sueldo oficial de 64 mil 840 pesos mensuales, el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, acumula al menos ocho propiedades en distintas regiones del estado. Así lo denunció públicamente el periodista Alejandro Leyva Aguilar, en su videocolumna difundida este 29 de septiembre en redes sociales.

La acusación señala que las propiedades, ubicadas en Oaxaca de Juárez, San Melchor Betaza, Asunción Ixtaltepec y destinos turísticos de la Costa, suman un valor superior a los 50 millones de pesos. Esto contrasta con el salario neto del mandatario, que ronda los 47 mil 872 pesos mensuales, tras descuentos. En tres años, su salario sumaría 1 millón 723 392 pesos, apenas el 3.4% del valor total de las propiedades.

En San Melchor Betaza, comunidad natal de Jara, se documentaron tres viviendas atribuidas al gobernador. Una de ellas, según vecinos, pertenecía a su hermana Edith Jara Cruz, quien habría sido despojada mediante engaños. Fotografías difundidas por habitantes muestran la construcción de una lujosa mansión con cuatro baños y acabados costosos.

El terreno de la casa despojada.

El contraste es aún más grave considerando que Betaza enfrenta altos índices de pobreza y carencias en servicios básicos. Mientras la mayoría de las viviendas carecen incluso de piso firme, la nueva casa del mandatario destaca por su ostentación. Leyva Aguilar denunció que este “ominoso contraste” exhibe la desigualdad agravada en la Sierra Norte.

Las otras propiedades incluyen una mansión en Asunción Ixtaltepec, una residencia remodelada en San Martín Mexicapan, otra en San Andrés Huayápam con barda de cantera verde, una más en el fraccionamiento Indeco de Santa Cruz Xoxocotlán y otra más en San Agustín de las Juntas. Vecinos hablan además de terrenos adquiridos en Huatulco y Puerto Escondido, en donde, de acuerdo con la familia, tienen proyectada la construcción de hoteles.

En su publicación,el periodista remarcó que los costos de estas obras y adquisiciones no son compatibles con el ingreso reportado por el gobernador. Las estimaciones de albañiles y proveedores locales calculan, por ejemplo, que la mansión en Betaza sola costó entre 10 y 15 millones de pesos. “¿Quién pompó?”, ironizó Leyva.

Construcción de otra casa en Betaza.

La denuncia también cuestiona la pasividad de los reporteros oaxaqueños que, en conferencias con dirigentes de Morena, evitan indagar sobre nepotismo y corrupción del gobierno de Salomón Jara. En lugar de ello, —afirma Leyva— se concentran en “cuestionamientos secundarios”, dejando intacto el escrutinio sobre el crecimiento patrimonial del mandatario y su familia.

Otro de los puntos señalados es el despojo a su propia hermana. Leyva narró que Jara usó maquinaria pesada y cuadrillas de trabajadores provenientes de Tiltepec, municipio de la Costa de Oaxaca, para apropiarse del predio, expulsando a la propietaria legítima. Testimonios y gráficas entregadas al periodista respaldan esta acusación, aún no respondida por el gobierno estatal.

La crítica se extiende al círculo político cercano a Jara. Durante la visita de Luisa María Alcalde a Oaxaca, Antonino Morales Toledo, senador por Morena señalado como el principal operador de la ordeña de ductos de Pemex en el Istmo, apareció junto a dirigentes de Morena. Para Leyva, la presencia de este personaje refleja el deterioro ético del movimiento en el estado.

La casa familia demolida y reconstruida.

El periodista recordó además que más de 70 familiares del gobernador han sido colocados en cargos públicos. La combinación de nepotismo y enriquecimiento personal, aseguró, convierte a la administración de Jara en un ejemplo de “corrupción desmesurada”, pese al discurso de austeridad republicana que promueve del expresidente Andrés Manuel López Obrador y la actual mandataria, Claudia Sheinbaum.

La acumulación de propiedades en menos de tres años cuestiona la viabilidad del combate a la corrupción prometido por Morena. Leyva subrayó que, mientras los informes oficiales mantienen sin cambios el salario del gobernador, la realidad muestra un crecimiento patrimonial acelerado y sin explicación satisfactoria ante la opinión pública.

La denuncia exige una auditoría federal inmediata para revisar las finanzas personales de Jara y sus allegados. El periodista llamó a la Secretaría de la Función Pública y a la Auditoría Superior de la Federación a investigar el origen de los recursos que han financiado estas construcciones y adquisiciones.

Maquinaria oficial para trabajados privados.

Vecinos de Betaza y otras comunidades mencionadas han mostrado indignación. Mientras las carencias en salud, educación y empleo persisten, las imágenes de mansiones y bardas de cantera verde generan desconfianza hacia las instituciones.

La acusación pública refuerza un patrón recurrente en Oaxaca: gobernadores que terminan sus mandatos envueltos en señalamientos de corrupción, nepotismo y enriquecimiento ilícito. La diferencia, apuntó el periodista, es que Jara no esperó al final de su sexenio: en apenas tres años ya ostenta una riqueza exorbitante.

“Salomón Jara se ha ganado un lugar en Oaxaca cómo el gobernador, más corrupto de la historia”, sentenció Alejandro Leyva. Con ello cerró su videocolumna, que rápidamente circuló en redes sociales, alimentando el debate sobre el futuro político del gobernador y la credibilidad de la autodenominada “Primavera Oaxaqueña”.

Baños de 200 mil pesos.

 

El silencio oficial tras la denuncia refuerza la percepción de impunidad. Mientras no haya una respuesta clara ni una investigación independiente, la ciudadanía seguirá viendo cómo la brecha entre gobernantes y gobernados se ensancha. La corrupción denunciada erosiona no solo al gobierno estatal, sino al proyecto político de la Cuarta Transformación.

CATEGORIES
Share This