
Refinería de Salina Cruz no abarata gasolina: #Oaxaca sigue entre los estados con precios más altos del país
A pesar de contar con la refinería “Antonio Dovalí Jaime” en Salina Cruz, Oaxaca mantiene precios de gasolina más altos que la mayoría de los estados. La planta produce combustibles como Magna y Premium, pero su impacto local es mínimo, ya que la distribución y los precios dependen del sistema nacional de Pemex.
El principal factor detrás del encarecimiento es la logística. México transporta cerca del 70% del combustible en pipas, un método más caro que los poliductos. En Oaxaca, la orografía montañosa y las carreteras limitadas elevan los costos de traslado desde Salina Cruz hacia el interior del estado y regiones rurales.
A la logística se suma la escasa competencia. Oaxaca tiene una de las menores densidades de gasolineras del país, con una por cada 16 mil habitantes. Esta baja oferta permite márgenes de ganancia más altos, a diferencia de estados del norte, donde la cercanía a Estados Unidos incentiva precios más competitivos.
Los impuestos federales, como el IEPS y el IVA, representan hasta 41% del precio final y son iguales en todo México. Sin embargo, en el sur, la distancia a los principales puertos del Golfo y la dependencia de importaciones de gasolina encarecen aún más el costo para los consumidores.
Aunque la refinería de Salina Cruz opera a plena capacidad —alrededor de 330 mil barriles diarios— su producción se integra al sistema nacional de Pemex. Expertos coinciden en que mejorar infraestructura y competencia podría reducir precios, pero en septiembre de 2025, Oaxaca seguía en el top cinco con 24.30 pesos por litro.