
Huracán Melissa, con categoría 5, devasta Jamaica con vientos récord de 185 mph y siete muertes en el Caribe
El huracán Huracán Melissa, de categoría 5, asestó un golpe histórico a la isla de Jamaica la tarde de este martes 28 de octubre, registrando vientos sostenidos de hasta 185 mph (≈ 295 km/h) en el momento de su llegada. Según el Centro Nacional de Huracanes de EE.UU. (NHC), esta intensidad lo convierte en uno de los impactos más poderosos jamás registrados en el Atlántico.
Las consecuencias fueron catastróficas: fuertes lluvias, inundaciones repentinas y aludes afectaron especialmente las parroquias del suroeste como St Elizabeth, Westmoreland, y otras zonas costeras vulnerables. Se estima que precipitaciones de hasta 40 pulgadas (≈1000 mm) podrían haber tenido lugar en algunas áreas montañosas. Grandes extensiones de infraestructura cedieron: techos arrancados, hospitales con daño estructural y carreteras bloqueadas por deslizamientos son las primeras imágenes del desastre.
El saldo de vidas perdidas ya es preocupante: al menos siete muertes se han atribuido a Melissa en el Caribe, incluyendo en Jamaica, Haití y República Dominicana. En Jamaica, tres fallecimientos fueron reportados mientras el huracán se aproximaba y comenzaron los trabajos de evacuación. La cifra tiene el riesgo de aumentar conforme avance la evaluación de daños.
La marejada ciclónica y el oleaje extremo agravaron aún más la tragedia: se han reportado inundaciones costeras de varios metros, árboles derribados, cortes masivos de electricidad —cerca del 35 % de los clientes en Jamaica quedaron sin servicio eléctrico— y comunidades aisladas. El primer ministro jamaicano, Andrew Holness, decretó estado de emergencia nacional y advirtió que “ninguna infraestructura está preparada para resistir categoría 5”.
El impacto en el sector turístico —que representa cerca del 33 % del PIB de Jamaica— es especialmente grave: resorts y costas populares quedaron afectados, lo que anticipa una crisis económica además de la humanitaria. La recuperación será prolongada. Aunque Melissa ha comenzado a debilitarse al cruzar la isla, sigue siendo un huracán de alto riesgo y se dirige hacia México, Cuba y Bahamas, lo que impone mantener alerta máxima.
Ante esta emergencia, apelamos a nuestra audiencia para solidarizarse con la población jamaicana, compartir información verificada sobre donaciones y esfuerzos de rescate, y mantenernos atentos a las actualizaciones de la NHC y de los organismos de protección civil. La magnitud de este huracán lo convierte en un “evento generacional” y evidencia la urgencia de reforzar políticas de prevención, infraestructura y respuesta ante desastres.

